40 años de doctrina social cristiana desde México para toda América Latina y el Caribe.

Han pasado 40 años desde que un grupo de laicos católicos, con espíritu ecuménico, en diálogo con las culturas, se estableció el objetivo de contribuir a formar la conciencia personal y social, para construir una realidad social justa a la luz del Evangelio y a través de la investigación, la enseñanza y la difusión del pensamiento social cristiano.

Bajo esta premisa nace el Instituto mexicano de doctrina social cristiana (Imdosoc), entidad cuyos valores están centrados en ser comunidad cristiana de encuentro, formación y servicio y como ha asegurado a ADN Celam, Constantino de Llano Marhx, presidente de Imdosoc, “nada de esto sería posible sin el compromiso de quienes laborando día a día en Imdosoc, a lo largo de 40 años, le han dado forma”.

“Desde luego, gracias al atinado acompañamiento de nuestros consejeros y asociados y la generosa y desinteresada aportación de recursos de nuestros donadores que cubren el importante diferencial entre lo que el instituto produce por sí mismo y las grandes necesidades por satisfacer para poder cumplir cabalmente con nuestra misión”, acotó.

70 mil estudiantes

¿Qué balance hace de estos 40 años de camino del Imdosoc?

“Citando a uno de nuestros presidentes, el Ing. Bernardo Pacheco, así como desde nuestra fundación queríamos, hoy queremos ser un instrumento más que contribuya a la formación de la conciencia social solidaria de los mexicanos, pues vemos como un escándalo que en un país mayoritariamente católico, se vivan situaciones de pobreza, injusticia, explotación, violación de derechos humanos fundamentale y que la fe no tenga la fuerza suficiente para transformar desde adentro valores, conductas, actitudes y estructuras.

Actualizando el balance que hiciera la Dra. Valentina Septién hace diez años, las metas plasmadas en el Ideario “fomentar la investigación y estudio, la enseñanza y la difusión de la doctrina social cristiana”, se han cumplido con creces. La formación en la doctrina social cristiana es quizá uno de los mayores logros: más de 70 mil estudiantes han pasado por nuestras aulas, al igual que más de ciento cuarenta mil interesados en escuchar las conferencias, en la última década. Hemos comenzado a dar los primeros pasos en investigación.

Asimismo, la producción editorial ha continuado, tanto con nuestras revistas Signo de los Tiempos: nuestro instrumento de difusión y La Cuestión Social que tiene un corte académico con artículos de fondo sobre la doctrina social cristiana, con los mejores autores que sobre el tema hay en el mundo, como con la publicación de libros que ya rebasa los 600 títulos.

Hoy nuestros cursos han evolucionado por un lado, respondiendo a las formas de aprendizaje e interacción de los jóvenes, con talleres vivenciales que acompañados de sólida instrucción, les permiten aprender e interiorizar los conceptos, y por el otro, como nos invitara SS el Papa Francisco, siendo Iglesia en salida, acercándonos a nuestros alumnos, allá en los lugares donde viven y trabajan. Asimismo, los hemos podido enriquecer, de tal manera que ahora tenemos cursos introductorios, de profundización y de especialización, como la Maestría en Pensamiento Social Cristiano, que junto con la Universidad Católica Lumen Gentium impartimos”.

¿Cómo se ha replanteado Imdosoc el pensamiento social de la Iglesia luego de coyunturas como la del covid-19?

“Ciertamente una pandemia que trajo tanto sufrimiento y pérdidas de vidas no es algo deseable; sin embargo, ante la necesidad de continuar con nuestra misión de ayudar a la evangelización de este mundo desde lo social, tuvimos que reinventarnos y reconvertir, adaptar o rediseñar nuestros oferta académica a formato digital, de tal manera que se pudiera impartir en forma remota. Aunque no se planeó así, esto nos abrió grandes oportunidades, pues con ello se borraron las limitaciones geográficas y de tiempo, y pudimos llegar a públicos nuevos en el mundo de habla hispana”.

Francisco, el gran impulsor

¿Cuáles considera los retos y oportunidades del pensamiento social cristiano en la actualidad?

“Así como el llamado del Sumo Pontífice para estudiar los contenidos y confiar en la doctrina social de la Iglesia fue vista por el núcleo que desarrolló el Imdosoc como un acicate y como un apoyo para la idea de dar vida a una institución laica, autónoma, en comunión con la Iglesia, desde la que se pensaran y plantearan algunos de los problemas más serios del país a partir de las ideas fundamentales, de las intuiciones y de las recomendaciones de la DSI, hoy la enseñanza social del Papa Francisco es primero que nada un gran motivante para nosotros, pues a diario escribe Su Santidad de Doctrina Social.

También es motivo de reflexión, estudio, pero sobre son directrices de acción, por ejemplo, en el cuidado de la casa común las devastadoras consecuencias de deterioro se esta que afectan primero que a nadie a los más desprotegidos de este mundo. El deterioro mundial de las instituciones democráticas, que la sociedad menosprecia y los políticos populistas atacan, y tratar de construir una nueva sociedad en función del verdadero bien común.

Un tema que no se ha abordado todavía y que habrá que hacerlo con carácter de urgente son los desafíos éticos que traerá el uso de la inteligencia artificial. Habrá que estudiar y entender el tema, eliminar mitos, usarla en nuestro día a día, con todos sus riesgos, para poder después emitir juicios y directrices de acción”.

Migraciones, corrupción, violencia, pobreza, totalitarismos, un coctel que sigue profundizando las brechas sociales en el continente, ¿cuál debe ser el papel de los cristianos frente a estos flagelos?

“De compromiso, de acción creativa y coordinada. Eliminar los esfuerzos aislados, por el contrario sumar, organizarlos a la luz del Magisterio Social de la Iglesia, tratando de hacer vida el Evangelio, siendo, como se nos invitó Iglesia en salida dando preferencia a los descartados de este mundo”.

Tomado de ADN CELAM

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