Los preparativos para el 53º Congreso Eucarístico Internacional no se detienen. De ahí que delegados de 34 Conferencias Episcopales del mundo se hayan reunido del 11 al 15 de septiembre en Quito.
La agenda de esta Asamblea Plenaria sirvió para presentar el documento base del evento Internacional denominado “Fraternidad para sanar el mundo,” además de mostrar los avances obtenidos en términos teológicos, litúrgicos, logísticos y comunicacionales del Congreso Internacional que se realizará del 8 al 15 de septiembre de 2024.
Un camino preparatorio
El documento base está orientado a todos los fieles y reflexiona sobre elementos fundamentales para fomentar el espíritu de fraternidad en la vida diaria. Además, busca contribuir al desarrollo de las actividades pastorales previas al congreso diseñadas para las jurisdicciones eclesiásticas.
Al respecto Mons. Francisco Alberto Sanguinetti Montero, Obispo de Canelones – Uruguay, aseguró que el contenido del documento base se puede sintetizar en dos aspectos primordiales. En primer lugar, aborda con profundidad en “el don de la Misa, el don de la Eucaristía, donde Cristo está presente, quien murió y resucitó”. En segundo lugar, está el “llamado que hace a la reconciliación y a mirar a los demás como hermanos”.
Sobre el mismo tema Mons. Alfredo José Espinoza Mateus Arzobispo de Quito – Ecuador, reconoció que la organización de esta actividad supone un gran desafío para Ecuador, un país consagrado al Sagrado Corazón de Jesús y que ama profundamente la Eucaristía. “Agradezco de corazón al Comité Pontificio para los Congresos Eucarísticos y a la Comisión Teológica, que han tenido la delicada misión de elaborar este documento. El mismo que servirá como inspiración para hacer un camino preparatorio hacia este gran acontecimiento eclesial,” afirmó.
Un proceso espiritual que se extiende a las demás áreas, logrando diferentes alcances gracias a los responsables de las comisiones. Igualmente, esta Asamblea Plenaria permitió que se conocieran los progresos en la organización de la agenda que se ofrecerá a los asistentes.
Los organizadores
Mons. David de la Torre, Obispo Auxiliar de Quito y presidente de la Comisión Teológica comentó que el Papa Francisco escogió el lema del Congreso: “Fraternidad para sanar el mundo,” pensando en la relación directa entre su pontificado y la encíclica “Fratelli Tutti,” uno de los documentos fundamentales para comprender las líneas teológicas y pastorales que identifican su magisterio.
En este sentido, aclaró que el tema del Congreso Eucarístico Internacional se aleja de la teoría. Por el contrario, toca la existencia del mundo, en el que hay una gran diversidad de heridas provocadas por las guerras, conflictos y expresiones de las violencias.
Por su parte el P. Corrado Maggioni, presidente del Comité Pontificio para los Congresos Eucarísticos Internacionales, mostró su beneplácito por el trabajo adelantado por el Comité Local en Ecuador, animándolo a continuar en este camino de preparación que se espera sea el mayor encuentro de la Iglesia en el mundo dispuesto a reflexionar sobre la Eucaristía como centro de la vida cristiana.
A su turno el P. Juan Carlos Garzón, Secretario General del Congreso, se refirió a los avances alcanzados en materia de organización lo que desde su percepción hace evidente “la fecundidad de la Eucaristía para la evangelización y la renovación de la fe en el continente Latinoamericano”.
Un congreso de todos
Las delegaciones que asistieron a la Asamblea Plenaria de los organizadores del 53º Congreso Eucarístico Internacional que se dieron cita en Quito, estuvieron integradas por 46 personas entre cardenales, obispos, sacerdotes y laicos provenientes de 34 países.
Entre ellos aparecen: Papúa-Nueva Guinea, Suiza, Italia, Japón, Paraguay, Polonia, Eslovenia, Hungría, Canadá, Australia-Nueva Zelanda, Taiwán, Togo, México, Chile, Irlanda, Puerto Rico, Venezuela, Perú, Ruanda, Namibia, Colombia, Portugal, España, Turquía, Francia, Uruguay, Guatemala, Estados Unidos, Filipinas, Corea, Panamá, Lesoto, República Checa y Alemania.