Padre de amor y misericordia, en este mes dedicado a tu madre, La Santísima Virgen María y a todas las madres, queremos ponerlas bajo tu mirada paternal. De una manera muy especial a todas las madres de los sacerdotes, para que les concedas salud, bienestar, y las cuides y protejas, así como Tu Hijo Jesucristo, redimensionando el don de la maternidad, quiso tener una madre a la cual cuidó, amó, respetó y se sometió a su autoridad.
Concede la salud a quienes están enfermas, en soledad o ancianidad, y recompensa en cada una de ellas el don de la maternidad y de tener un hijo sacerdote. AMÉN.
